Para los que ya rondamos los 60 años, Carlos Alberto Reutemann fue nuestro héroe. Hoy cumple 76 años y para aquellos que lo seguimos en su periplo en la Fórmula 1 nos parece que fue ayer.
Antes de verlo por televisión, yo por ejemplo, iba al cine San Martín a ver las carreras en vivo y pantalla grande y en color, y palpitábamos con cada carrera en aquel 1981 que estuvo a nada de ser campeón con aquel Williams que en la primera mitad del año volaba y después de cambiar la marca de los neumáticos, de Michelin a GoodYear, casi que se arrastraba.
No se si me parece a mi, pero ese año manejó como nunca, hizo un año tremendo, se peleó con el equipo por los famosos carteles de Brasil, se ocupaba personalmente de su auto en cada carrera, protestó cuando le pusieron otro motor al que él había elegido en Alemania y se rompió y después de muchos años se encontró con Frank y le preguntó que había pasado con aquel motor que pidió él y se lo dieron a Jones, y Williams le contestó, "Carlos...pasó hace mucho tiempo".
O el día que clasificó en Monza sin los "bigotes" delanteros para ver si podía ganar la pole contra los ultra rápidos Renault Turbo e hizo un tiempazo que lo dejó en la primera fila, dicen los que estaban allí ese día que daba miedo escuchar el motor de Reutemann encarando Lesmo sin levantar nada, además que su amigo, Giles, decía a quien quisiera escucharlo: "vieron el tiempo que hizo Carlos"? entre asombrado y contento.
Williams intentó explicar algo en algún momento, aludió a un tema político, que a Brabham le convenía que Williams cambiara los neumáticos, que hubo algún gesto de Ecclestone para que eso ocurriera, con los Michelin logró 37 puntos, con los americanos solo 12.
Igual llegó a Las Vegas con un punto de ventaja sobre Piquet, pero desde el vamos el auto no era competitivo, Jones volaba en ese intrincado circuito inventado quien sabe por quien, Lole perdía posiciones hasta perder el campeonato, domingo triste si los hubo para los hinchas, todos nos acordamos mal de hasta la bisabuela de Williams y Head.
Yo lo vi correr, en 1979 cuando debutó con el Lotus número 2, compañero de Andretti, pero no fue el mejor año del equipo del genio de Colin, venían de ganar fácil el campeonato anterior, pero ese año, el Lotus '80 fue un fiasco con el cual creo que nunca corrió.
Con el hermoso Brabham BT 44 ganó varias veces, incluido Nürburgring, llegó a Ferrari a suplantar al quemado Lauda que volvió a poco del accidente y fue su compañero en el '77. Luego de pagar unos cuantos dólares a Ecclestone para irse de Brabham.
Fue el encargado de probar las primeras gomas radiales Michelin de la categoría, haciendo un trabajo muy recordado por la casa francesa.
Ganó en Mónaco en el '80, sin dudas una campaña fantástica en la máxima y todos nos apenamos en el '82 cuando colgó el casco, dijo que cansado de la categoría y su entorno.
Pero los de nuestra edad, por ahí no conocíamos mucho de sus inicios, y en Azul tenemos la suerte de compartir la vida con "Cacho" Franco, compañero y rival, quien de vez en cuando nos cuenta sus experiencias con Reutemann, como por ejemplo cuando recorrían la ruta de un Gran Premio juntos, "Cacho" manejaba todo el tiempo, el "Lole" de acompañante, sin hablar a lo largo de todo el camino y cuando se empañaba el vidrio de la ventanilla dibujaba un corazón con su dedo y ponía M y C (Mimicha y Carlos) dentro del mismo.
Cuando compartían el equipo oficial Fiat, con las 1500 y el "Chino" Rodriguez Canedo también corría para el equipo, no toleraba compartir la habitación de los hoteles, un tipo reservado, serio, hasta podía pasar por antipático, muy especial y sin dudas que su forma de ser lo ayudó a irse a Europa a vivir solo y arreglarse para permanecer mucho tiempo lejos de su familia en pos de su pasión.
Una vez, estando en 9 de julio y luego de cenar tomando un café en el hotel junto al Profesor Alberto Juárez y otros compañeros de Campeones, llegó Carlos Marincovich, había vuelto al TC con una Dodge y había clasificado dentro de los diez primeros, se vino a nuestra mesa, se sentó, pidió su whisky de siempre y comenzó una charla con Juárez sobre su actuación de ese sábado. En algún momento Juárez le preguntó porque el no se había ido a correr a Europa, siendo que los dos únicos pilotos que le podían ganar a Reutemann en un Fórmula eran él y "Cacho" Franco, el "Ruso" contestó: "primero y principal era que yo ganaba mucha guita corriendo acá y segundo tenés que ser una heladera de frío para aguantar estar solo allá como el Lole, yo me aprieto un dedo con una puerta y me vuelvo"!
Con "Cacho" tienen dos carreras empatadas, tuvieron mucha afinidad con las familias, pero una vez estando en una carrera de Fórmula 1 y recorriendo los boxes se encontraron con Mimicha, hacía mucho tiempo que no se veían, entonces le dijo a "Cacho" esperá un poquito así lo saludas a Carlos que está probando, bueno, llegó se bajó del auto, caminó hacia adentro del box, Mimicha le dijo, mirá Carlos quién te vino a saludar, lo miró y le dijo: "que hacés "Cacho", como andás? le puso una mano en el hombro a la pasada, porque nunca se paró ni para darle la mano y siguió caminado para quien sabe que lugar.
Pero hay que contar también que le mandó una larga carta, que nunca pude ver ni leer ya que "Cacho" no la podía encontrar, pero decía que lo había emocionado porque en ella Reutemann le expresaba todo lo que sentía por este rival, le era más fácil escribirlo que expresarlo.
En los días que corrían juntos, le preguntaron que le parecía Franco, Lole dijo: "es rapidísmo, pero va muy al borde del palo".
Carlos Alberto Reutemann, todo un símbolo para los amantes de este hermoso deporte, hoy cumple 76 pirulos.
FELIZ CUMPLEAÑOS CAMPEÓN.
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