Con gran éxito se realizó el II° Encuentro de TC Histórico de Azul, hoy en el predio de la Sociedad Rural de Azul, se expusieron los autos que se llegaron a nuestra ciudad, como así también varios ex pilotos de la popular categoría. En horas del mediodía se sirvió un excelente almuerzo y se entregaron presentes a todos los participantes del Encuentro.
Así como terminó su última carrera, Juan Manuel Landa conserva su Dodge que lo llevó al sub campeonato en el TC.
Hermoso el Ford Falcon, réplica del que llevara al campeonato, post mortem, a Nasif Moisés Estéfano, el gran piloto tucumano que perdiera la vida en un Gran Premio muy cerca de su Aimogasta natal.
Esta es la Chevy original de Emilio Salvador Satriano, con la que lograra el torneo de 1990, hoy está en Olavarría y es propiedad de otro ex piloto del TC, Juan Carlos "Nuchi" Spinella.
Dos ex pilotos del TC, Orlando "Novillo" Rodríguez, de Laprida, con su bonomía de siempre contando sus anécdotas de tantas carreras en las que participó y Ricardo De Arzave.
Oscar "Cacho" Franco charla animadamente con Luis Saint Germés, dos ex pilotos de nuestra ciudad, participa de la misma, Jorge Schechtel.
Enrique Aranzana también se llegó hasta Azul para participar de esta fiesta, el ex piloto de TC, debutó en el Autódromo de Buenos Aires con el Torino de Omar Rangone.
El ex piloto de Olavarría, Eduardo "Flaco" Martínez, campeón en su momento de la Promocional 850 del Centro llegando al TC con la Dodge del Club Olavarriense de Competición que luego manejara José María Romero, el "Flaco" también supo correr con el Torino de Azul.
Desde Tres Arroyos se llegó este Ford Falcon, réplica del que corriera Héctor Luis Gradassi en 1971 siendo compañero de equipo de Carlos Alberto Pairetti, a poco de andar el año el auto fue modificado en su trompa y también se le cambió el color.
También de Tres Arroyos se llegó este Torino, réplica de los primeros autos que poblaron los parques cerrados del nóvel TC A, por el color se puede imaginar por ejemplo el que corriera Carlos Marincovich, Luis Di Palma o Emilio Bertolini.
Con este Falcon muy modificado y motor F100, participó a fines de los '60 en el TC, Domingo López Oribe, el auto es original y su motor suena como los dioses.
Esta Torino es una réplica de uno que corriera el Maestro, Eduardo Copello en 1967, sucede que en aquella época, el equipo oficial, que debutara en San Pedro con el triunfo de Gradassi, no participaba de todas las carreras, ese año se corrieron 36, entonces, Oreste Berta, hizo tres autos iguales a los oficiales, pero con el apoyo de Bardahl, para que no perdieran puntos en el torneo. Pertenece a unos jóvenes entusiastas de Buenos Aires, y lo trajeron andando, fue su bautismo viajando, aún le faltan algunas cosas para terminarlo como corresponde, como por ejemplo la jaula antivuelcos.
Excelentemente mantenida la Ford que perteneció a Críspulo Villanueva, ahora propiedad de un señor de Tandil.
La "cupecita" Chevrolet de Norberto "Nene" Pascualli, de Benito Juárez, ya muy modificada para los últimos años de actividad de estos autos en las rutas.
Omar Rangone se reencuentra con su último Torino después de más de 20 años, está igual, decía Omar, aquí lo acompañan Marquestau y su hijo Edgardo Rangone, semi tapado. Rubén Luis Di Palma volvió al TC con este Torino después de muchos años, se lo llevó a Arrecifes y en su taller le hizo muchas modificaciones, quedando como se lo ve hoy, debutó en Buenos Aires llegando 14°, corrió en Balcarce, dónde se tocó con Osvaldo Sasso y rompió un neumático debiendo abandonar en la serie, y por último lo hizo en Punta Alta dónde se rompió el motor. Rangone se lo vendió a Oscar Rivelli y el hijo de este a su actual propietario oriundo de la Ciudad de Luján.
El motor Ford 8, 59 AB, que equipa el auto que perteneció a Remo Gamalero.
Arriba posan Silvio Puccini junto al constructor Oscar Jensen que hizo más de 40 autos para el TC de ruta, debajo el Torino con el cual Puccini corriera en el TC.
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